Anuncio una casa donde ya no quiero vivir
Bohumil Hrabal
Aleph Editores
1989
126 págs.
p.v.p. 10.70 euros
isbn: 84-7669-742-2

Bohumil Hrabal (Brno, 1914—Praga, 1997) desempeñó durante su juventud las más variadas profesiones. Muchas de las atmósferas y personajes de sus libros son consecuencia directa de ese historial. Trabajó como ferroviario (Trenes rigurosamente vigilados), empleado de una unidad de reciclaje de papel (Una soledad demasiado ruidosa), tramoyista en un teatro (Bodas en casa). Y también en una central metalúrgica: Anuncio una casa donde ya no quiero vivir. Siete relatos que transcurren entre almacenes y monos de trabajo y en los que la magia se filtra a través de la fragilidad de los personajes: “—Márchate —gritó el guardia—. ¡Y las demás, con las escoba a barrer los vagones vacíos!— vociferó y ordenó, pero las prisioneras sabían que se estaba disculpando. Fábricas, cervecerías, pensiones, esos son los escenarios. Pero leemos títulos como ‘Kafkiana’, ‘El ángel’ o ‘La traición de los espejos’.

A menudo la lógica narrativa se diluye y cuesta entender por qué suceden las cosas, en qué momento de qué historia nos encontramos. La fragmentación y el uso de la analogía como herramienta plástica generan escenas ambiguas, como si se nos estuviera relatando un sueño. Y en un sueño los detalles aparentemente arbitrarios suelen ser los más importantes: “Las manos de la vieja reposaban sobre su vientre como si palpara la espalda de un hijo perdido.” Muchas imágenes parecen sacadas de poemas, pero logran una nitidez difícilmente alcanzable mediante descripciones figurativas. Quizá por eso, toda una generación de cineastas checos encontró en los libros de Hrabal un soporte idóneo para su adaptación cinematográfica. Trenes rigurosamente vigilados (Jirí Menzel, 1966), que contó con Hrabal como coguionista, es buen ejemplo. Si a lo anterior añadimos el particular sentido del humor de Hrabal, el resultado es uno de esos libros a los que se vuelve buscando un estado de ánimo. Uno de esos libros que nos resistimos a prestar.

“Luego, por la mañana, pregunté: «Poldinka, ¿me quieres aún?» La próxima vez, cuando me despierte, preguntaré: «¿Duermes, Sumo Pontífice?» Un día, acaso, me acercaré el espejo a la boca y por una vez no se empañará.”

Texto: Andrés Navarro / Ilustración: Paula G.

Otros títulos para lectores de Anuncio una casa donde ya no quiero vivir

Una soledad demasiado ruidosa
Bohumil Hrabal
Ediciones Destino
1990
160 páginas
p.v.p: 6’95 euros
isbn: 84-233-1854-0

Yo que he servido al rey de Inglaterra
Bohumil Hrabal
Ediciones Destino
1989
272 páginas
p.v.p: 16,50 euros
isbn: 84-2333-1718-8

Trenes rigurosamente vigilados
Bhoumil Hrabal
El Aleph Editores
2006
128 páginas
p.v.p. 14 euros

1 comentario:

ignacio dijo...

impresionantes los dibujos!!!
felicidades a la ilustradora :)